Jueves 25 de Julio, el calor extremo alcanzó su punto más intenso para millones de personas en el centro de Estados Unidos, marcando un pico abrasador en el mes más tórrido del verano. Una cúpula de calor ha cubierto gran parte del país, y aunque el centro ya sintió el golpe más fuerte, las condiciones agobiantes apenas comienzan a extenderse hacia el Atlántico medio y el noreste.
El primer deceso relacionado con el calor en esta temporada 2025 fue confirmado en el Condado de Dallas, en Texas, según el Departamento de Salud local. La víctima fue un hombre de aproximadamente 60 años, con problemas médicos preexistentes no especificados.
La sensación térmica —que combina temperatura y humedad para mostrar cómo se percibe realmente el calor— superó los 38 °C desde la Costa del Golfo hasta el Medio Oeste la tarde del jueves. En zonas del valle del Misisipi, esta cifra alcanzó los 43 °C y más.
Memphis, en Tennessee, vivió el miércoles más caluroso del año con 36 °C y una sensación térmica que llegó a los 41 °C. Un día después, el jueves, los valores subieron hasta los 42 °C, mientras que en Greenville, en el estado de Misisipi, la sensación térmica alcanzó los 46 °C. Más al norte, en Chicago, se sintieron más de 38 °C, y en Syracuse, en Nueva York, se rompió el récord de temperatura máxima con 34 °C, superando el registro de 1941.
El jueves por la tarde, el calor abrasador avanzó hacia el noreste, afectando incluso a localidades como Burlington, en Vermont, a tan solo 50 kilómetros de la frontera con Canadá, donde los termómetros marcaban 32 °C.
Lo más intenso para el este del país llegará este viernes, con temperaturas máximas cercanas a los 33 °C desde Washington hasta Boston, cifras que están muy por encima del promedio para esta época del año. Se espera que se rompan récords en ciudades como Baltimore, Filadelfia y Nueva York.
El índice de calor superará los 38 °C en muchas grandes urbes. Tanto Washington como Filadelfia podrían superar los 40 °C durante la tarde, y en Baltimore se prevén picos cercanos a los 43 °C.
El calor extremo continúa siendo el fenómeno climático más letal en los Estados Unidos. A nivel mundial, las olas de calor se están volviendo más frecuentes, intensas y prolongadas por el avance del calentamiento global, impulsado por la quema de combustibles fósiles.
Más de 90 millones de personas en la mitad oriental de Estados Unidos están actualmente bajo alerta por riesgo importante de nivel 3 (de 4) debido al calor. Para este viernes, ese número superará nuevamente los 90 millones, según el Servicio Meteorológico Nacional.
De acuerdo con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), este calor tan extremo puede afectar a cualquier persona sin acceso a una adecuada refrigeración o hidratación, no solo a las poblaciones vulnerables. Permanecer en interiores sin aire acondicionado durante las horas más calurosas del día puede ser peligroso.
Además, la alta humedad impedirá que las temperaturas bajen lo suficiente por la noche. Para el amanecer del sábado, Washington podría mantenerse cerca de los 27 °C, es decir, casi 6 grados por encima del mínimo promedio para finales de julio.
Cuando el cuerpo no encuentra alivio nocturno, el riesgo de padecer afecciones relacionadas con el calor se multiplica. Las temperaturas mínimas nocturnas están subiendo más rápidamente que las máximas diurnas, lo que refleja uno de los efectos más silenciosos del cambio climático.
Un análisis reciente de Climate Central reveló que el calentamiento global ha hecho que esta ola de calor sea al menos tres veces más probable para cerca de 160 millones de personas —casi la mitad de la población de EE.UU.— en comparación con un escenario sin emisiones de combustibles fósiles.
La cúpula de calor comenzará a debilitarse este sábado, dando paso a condiciones más típicas —aunque todavía intensas— para finales de julio, especialmente en el noreste y el Medio Oeste. No obstante, el calor persistirá durante el fin de semana, sobre todo en el sur del valle del Ohio y el Atlántico medio el sábado, y en partes del sureste este domingo.
De acuerdo con las últimas proyecciones del Centro de Predicción Climática, esta tendencia de calor anómalo continuará durante la próxima semana, manteniendo al sur de Estados Unidos con temperaturas muy por encima de lo normal.
